Hubo promociones especiales, charlas y música. Y los bares y negocios de libros cerraron más tarde.
La avenida Corrientes ayer hizo honor a su tradición de libros y café y, por segundo año consecutivo, se convirtió en una gran sala de lectura para la "Noche de Librerías". El encuentro, organizado por la Dirección General de Industrias Creativas de la Ciudad, convocó a cientos de fanáticos y también curiosos, que aprovecharon las promociones especiales de las librerías y, ya en el cierre, escucharon a Soledad Villamil cantando tangos.
La noche en la que las librerías no duermen empezó pasadas las 20.30 en el Bar La Paz, en la esquina de Corrientes y Montevideo. Allí estuvieron el presidente de la Cámara Argentina del Libro, Carlos de Santos y la presidenta de la Cámara Argentina de Publicaciones, Pía Gagliardi, entre otros.
El tránsito estuvo cortado entre Talcahuano y Callao. Y en el medio de la avenida armaron livings con sillones blancos para que la gente se siente a leer, tomar un descanso o charlar con amigos.
Muchos asistentes aprovecharon para entrar en bares y librerías para descubrir a actores como Graciela Borges, Nicolás Pauls o Graciela Dufau leyendo sus textos favoritos. Fue el caso de Martín Vázquez (42), que fue con su hijo Gastón (14). El papá contó: "Me gusta el clima que se genera en encuentros como éste, donde mucha gente se vuelva a la calle con el mismo objetivo".
En la librería Gandhi Galerna, algunos se detuvieron a escuchar a los Eternautas, un grupo de historiadores que trazó un mapa literario de Buenos Aires. Así repasaron las referencias a la ciudad en la obra de, entre otros, Silvina Ocampo, Julio Cortázar, Juan José Saer o Borges.
También hubo charlas en las librerías Cúspide, donde una editora explicó cómo acercarle el arte a los chicos, y Hernández. Aquí, los escritores Guillermo Martínez, Federico Jeanmarie y Daniel Guebel debatieron sobre la narrativa argentina. Mientras, en Losada, el dibujante Liniers conversó con Mex Urtizberea.
Los bares más emblemáticos también participaron. En La Opera, Alejandro Tantanian, Santiago Gobernori y Romina Paula discutieron sobre dramaturgia. Y en el Gato Negro, entre aroma a especias y café recién molido, Bárbara Belloc, Cecilia Pavón y Washington Cucurto recitaron poesía. Hasta allí llegó Lydia Czitrom, de 71 años, que contó: "Soy lectora desde que era una nena e iba a las bibliotecas públicas de Quilmes".
También se sumó la disquería Zival's, donde Sergio Pujol presentó su libro "El nombre del folclore", una biografía de Atahualpa Yupanqui.
A la altura de Talcahuano estaba el escenario, donde Darío Jalfin interpretó canciones de aire pop e influencia latinoamericana. El cierre fue con los tangos de Soledad Villamil. Las librerías trasnocharon hasta la 1, junto a un público que no quiso perderse la oportunidad de visitarlas en un horario inusual
Fuente: Diario Clarin
Fecha de Publicacion: 11 de diciembre de 2008
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